Esta es la historia de Victoria, una joven emigrante española en Berlín y de las dos horas y catorce minutos en una noche cualquiera de su insignificante vida. Concretamente la película narra la ultima parte de una noche de fiesta de la protagonista y de como conoce a cuatro chicos berlineses y de la relación que entabla con ellos.
La peculiaridad y originalidad de esta película no estriba en su guion, sino en su realización, porque el director, Sebastian Schipper, decidió hacer todo el rodaje con un único plano secuencia, sin cortes ni artificios. Dos horas y catorce minutos rodados sin parar, desde la misma cámara y sin ningún tipo de corte en la grabación.
La decisión de hacer el rodaje en una única toma conlleva que la narración adquiera un ritmo trepidante y mayor realismo. La interpretación de los actores se convierte en una única posibilidad de éxito. No hay lugar para los errores y la improvisación se convierte en un elemento necesario no solo en la interpretación sino también en el trabajo técnico. Porque si bien los actores llevan sobre sus espaldas la responsabilidad de una actuación sin errores in-subsanables, no es menos cierto que el trabajo de todo el equipo técnico y en concreto el del director de fotografía también tiene gran parte de la responsabilidad encima. Porque dos horas y catorce minutos rodando con la misma cámara sin cometer ningún error, es tarea harto difícil.
Este tipo de rodaje convierte la película en una especie de obra de teatro. Porque al rodar en plano secuencia evitas la repetición de escenas más o menos cortas que suponen un trabajo mucho mas sesgado y preparado de los actores y en consecuencia más artificial. Nos acercamos por tanto al teatro, donde los interpretes actúan sin posibilidad de error y dejando cierto margen a la improvisación, pero a diferencia del teatro, aquí hay una dificultad añadida, porque normalmente en teatro estamos dentro de un recinto acotado, donde todo esta medido y controlado y donde las posibilidades de que ocurra algo inesperado se reducen considerablemente. En cambio en Victoria nos encontramos una gran cantidad de escenarios, desde los interiores hasta los exteriores rodados en Berlín. Ello supuso que existiesen diferentes equipos de dirección que coordinasen el rodaje en las diferentes zonas en los que se desarrolla la historia. A su vez se hizo necesario que todos los escenarios estuvieran a una corta distancia para facilitar el control de los mismos. Asimismo con este tipo de rodaje se facilita hasta casi hacerla desaparecer la labor de montaje, limitada casi exclusivamente a elegir cual de las tres grabaciones era la finalmente elegida para proyectar. Al contrario, imagino que la fase de producción previa fuese de una complicación enorme para que todo saliese correctamente.
Quiero aprovechar para hacer una comparación con dos películas del pasado reciente con las que Victoria puede tener cierto paralelismo. Por un lado con Birdman, del gran Iñarritu, con la que comparte la idea del plano secuencia, si bien con un matiz que pone una gran diferencia entre ambas. Porque el plano secuencia de Victoria es puro y absoluto. Real de principio a fin, a diferencia del de Birdman, que es único en su conjunto, pero falso e irreal. En Birdman el plano secuencia es falso, si existen los cortes, siempre sutiles, pero el rodaje si tuvo parones que lo convierten en un plano secuencia que en su totalidad es fingido, aunque a nivel narrativo el espectador vive la historia como si no existiesen cortes.
Por otro lado quiero hacer una comparación con Boyhood, de Linklater, que sorprendió el año pasado por su originalidad en cuanto a su realización. Linklater decidió rodar Boyhood en tiempo real, con los mismo actores. Nos encontramos en su momento con una joya cinematográfica por cuanto fue la primera película cuyo guion se desarrollaba en un lapso temporal de doce años y se rodó en tiempo real, es decir, se trabajó durante durante doce años con los mismos actores, por lo que fuimos testigos durante las casi tres horas de duración de la película del crecimiento de los mismos. En Victoria, con este tipo de rodaje también somos testigos de la vida de varias personas en tiempo real, aunque en un espacio de tiempo mucho mas corto.
Es obvio que esta forma de hacer cine pone el listón muy alto para los futuros trabajos. Porque se esta poniendo sobre la pantalla nuevas formas de hacer cine, formas arriesgadas, incluso a veces rozando lalocura, pero formas que hacen un cine más auténtico y real, implicando mucho más al espectador, que siente mas empatía y cercanía con los protagonistas.
De Victoria quiero destacar tres cosas. La primera el trabajo de todos los actores pero en concreto el de Laia Costa (Victoria) y Frederick Lau (Sonne) que bordan su papel y convierten un trabajo casi imposible en un ejercicio de interpretación soberbia. Porque hacen un trabajo propio del teatro pero con mucha mayor dificultad, por el dinamismo de rodar en la calle con cientos de elementos móviles. Destacar que Laia Costa apenas sale de plano durante todo el metraje sin que la cámara la abandone apenas en contadas ocasiones.
En segundo lugar el trabajo del director de fotografía, Sturla Brandth Grøvlen que hace un trabajo perfecto en una situación para nada sencilla. Porque rodar gran parte del tiempo corriendo detrás de los actores, en el interior de vehículos, entrando y saliendo de edificios, y todo ello sin cometer errores, es digno de admiración.
Y por último destacar el trabajo de Sebastian Schipper y agradecerle que tomase la decisión de rodar esta película en un único plano secuencia. Decisión valiente que convierte un film que en condiciones normales sería mediocre, en una pequeña obra maestra del cine. Ejercicio arriesgado que inventa un cine nuevo, más real, mas cercano al teatro y por ende más cercano al espectador, que vive el visionado de una forma mas activa y dinámica.
Recomiendo ver esta película para disfrutar de un cine diferente. Esta vez no dejo el trailer porque creo que es mejor enfrentarse a la película sin conocer muchos detalles de la historia. No os la perdais porque supone toda una gran experiencia para todo amante del cine.